La creación de SOAR-Ainjar continúa nuestros esfuerzos para expandir SOAR más allá de las fronteras tradicionales. Ainjar, que significa “río que corre”, es una ciudad del Líbano encerrada en el valle de Bekaa. La población de Ainjar es de aproximadamente 2,400 habitantes, compuesta casi en su totalidad por armenios. La mayoría de los armenios de Ainjar pertenecen a la Iglesia Apostólica Armenia de San Pablo, la segunda iglesia armenia más grande del Líbano. La comunidad apostólica armenia tiene su propia escuela, la escuela secundaria Haratch Calouste Gulbenkian. La Iglesia católica armenia de Nuestra Señora del Rosario en Ainjar sirve como iglesia para los católicos armenios, que también dirigen la escuela de las hermanas católicas armenias.
La Iglesia Evangélica Armenia sirve a la comunidad evangélica armenia en Ainjar. La Escuela Secundaria Evangélica Armenia de Ainjar se estableció en 1942 cuando la gente de Musa Dagh se estableció en la parte media del valle de Bekaa en el Líbano. La escuela tiene un lugar único en la comunidad ya que educó a cientos de niños durante una era de pobreza y enfermedad mientras los padres se preocupaban por proporcionar un umbral mínimo de subsistencia para sus familias. Otra singularidad de la escuela es su departamento de internado que se estableció en 1947 y pronto se convirtió en el hogar de muchos huérfanos y niños del Líbano, Siria y el Cercano Oriente.
La escuela con su sección de internado brinda oportunidades renovadas a los niños cuya estructura familiar, capacidad económica y situación social les han impedido disfrutar de oportunidades adecuadas en la vida. En 1955, la escuela contaba con todos los ciclos de educación desde el jardín de infantes hasta las clases de primaria, intermedia y secundaria en las que los estudiantes han podido completar sus requisitos educativos dentro del mismo ambiente de cuidado amoroso.
Actualmente, la escuela cuenta con logros nacionales e internacionales. Los estudiantes reciben becas de organizaciones e instituciones acreditadas a través de varias asociaciones como Amideast, Design for Change, Hilfsbund, World Vision... lo que demuestra un alto nivel académico y una gran necesidad de apoyo.
La escuela también es pionera en el campo de la educación especial con el nuevo “Programa de Educación Personalizada” diseñado para estudiantes con necesidades especiales, dificultades educativas y problemas psicosociales que los empodera para creer en sus habilidades y lograr más.
La educación, el cuidado, los servicios sociales y espirituales son derechos fundamentales de todo niño. La Escuela Secundaria Evangélica Armenia y su internado son embajadores de estos derechos.
